de 826
Caso 791

Hace once años me casé. Mi esposo ya tenía una hija de una relación anterior.... y ahora juntos tenemos además tres niños pequeños....

Hace un mes mi hijastra me confesó que, cuando ella llegó al país en que vivimos, su papá abusó de ella, así que yo lo confronté. Él dice que... como él había vivido separado de ella hasta los catorce años, ella decía que no lo veía como padre.

Cuando ella me dijo eso, yo pedí consejería a mi pastor, y mi esposo lo confesó, dijo que se arrepentía y entregó su vida al Señor Jesucristo.... Pero yo no tengo la misma confianza de dejar a mis niñas al cuidado de él y regresar al trabajo. Dejé de trabajar porque tengo miedo, y no quiero vivir así con este temor.... Él dice que nunca les haría daño a sus hijas.

Consejo

Estimada amiga:

Sentimos mucho lo que usted está sufriendo. Su situación es sumamente difícil, y creemos que sólo Dios sabe lo que más le conviene a usted. Pero sí podemos ofrecerle algunas sugerencias.

Los pormenores de su caso nos llevan a pensar que su hijastra ya debiera tener por lo menos veinticinco años. No podemos menos que preguntarnos por qué mantuvo ella el secreto durante tanto tiempo, pero decidió revelárselo a usted ahora. Sólo podemos imaginarlo, pero es posible que ella esté preocupada por el bienestar de sus tres pequeños hermanastros y hermanastras.

Su esposo se defiende diciendo que, cuando sucedió el abuso, la hija de él no lo consideraba como el padre de ella. Es posible que ya ella tuviera la apariencia física de una mujer adulta, así que parece que él está tratando de decir que ella lo atrajo como una mujer, y no como una niña, y como una desconocida, y no como su propia hija. En otras palabras, él está dispuesto a admitir el haber violado sexualmente a una mujer (antes de la edad de consentimiento), pero no está dispuesto a verse a sí mismo como un pedófilo.

El que su esposo haya confesado su pecado y haya decidido seguir a Cristo es una buena noticia. Sin embargo, todos sabemos por experiencia que los pedófilos dirán lo que les conviene a fin de tener acceso a los niños, sobre todo en la iglesia. En realidad, sólo Dios sabe si su esposo es un pedófilo.

Creemos que es prudente de su parte tener precaución y reservar su confianza. Su esposo necesita aceptar el hecho de que tendrá que pasar por un período de prueba durante un tiempo muy prolongado, y que es la consecuencia directa de lo que él hizo. También es prudente que usted se abstenga de aceptar que su esposo sea quien cuida a sus hijos e hijas mientras usted trabaja fuera de casa.

Como dijimos antes, sólo Dios puede darle la sabiduría necesaria para discernir si sus hijos corren o no corren peligro. Pídale a Él que le ayude a tomar las precauciones necesarias para no tener que vivir con este temor.

Le deseamos lo mejor,

Linda

Este Caso me ayudó Envíenme información Deseo una relación con Cristo
Información en este sitio