
En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» en nuestro sitio www.conciencia.net. Lo hizo de manera anónima, como pedimos que se haga; así que, a pesar de que nunca se lo había contado a nadie, nos autorizó a que lo citáramos, como sigue:
«Yo trabajo fuera de la ciudad en donde vivo con mi esposa y dos hijos. El motivo de trabajar fuera era mejorar económicamente. Todo iba bien hasta el día en que salí por la noche. Conocí a un tipo, el cual me inspiró confianza. Comenzamos a beber, y terminamos con unas prostitutas. Bebí, me drogué y gasté todo lo que había guardado para mi familia.
»¡En estos [días] he estado tan triste y deprimido! No encuentro qué hacer. Le mentí a mi esposa, y he pensado en quitarme la vida. ¡Me siento tan mal! Les fallé a mi esposa y a mis hijos. Necesito de sus consejos. Esto es lo peor que me pudo haber pasado.»
Este es el consejo que le dio mi esposa:
«Estimado amigo:
»En primer lugar, el quitarse la vida pudiera sacarlo de este problema, pero en definitiva no le serviría de nada a su esposa y a sus hijos. Es más, con eso usted los estaría condenando a dificultades económicas permanentes.... De modo que es evidente que sería muy egoísta de su parte que tomara la alternativa de suicidarse.
»Peor aún que su actual problema económico es la vergüenza que siente por las cosas malas que hizo y por todas las malas decisiones que tomó. Le fue infiel a su esposa y se expuso usted mismo a enfermedades venéreas que pudieran acabar con su propia vida. Si usted ahora tiene relaciones sexuales normales con su esposa, la estará contagiando a ella con cualquier enfermedad que pudo haber adquirido. Si su esposa se enfermara de gravedad a causa de esa noche que usted pasó con una prostituta, ¿acaso no sería eso lo peor que pudiera suceder?
»... Al mentirle a su esposa, usted la ha engañado aún más. Ahora debe volver a casa y contarle a ella toda la despreciable historia tan pronto como le sea posible. Ella se enojará y tal vez se encolerice más de una vez.... Recuerde que usted merece cualquier cosa que ella le diga, y que está demostrando valor al decírselo de una vez por todas. Ruéguele que lo perdone, y esté dispuesto a reconocer que la confianza que ella le ha tenido sufrirá por mucho tiempo en el futuro....
»Sería prudente de su parte que se haga examinar para ver si ha contraído alguna enfermedad, en lugar de arriesgarse a lo desconocido. También sería una medida sabia que consultara con un consejero que pudiera ayudarlos a usted y a su esposa a superar esta infidelidad. Este proceso sin duda sería más fácil si usted obtuviera un empleo en la ciudad en que viven....
»Hay Alguien que, sin lugar a dudas, lo perdonará si se lo pide. Su Padre celestial está consciente de la situación actual y quiere ayudarlo, pero usted tiene que pedirle perdón en el nombre de su Hijo Jesucristo. Si le pide con sinceridad que forme parte de su vida y lo ayude, Él le servirá de guía. No quitará las consecuencias del pecado que usted ha cometido, pero sí quitará la culpa y la vergüenza que siente.»
Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se ingresa en el sitio www.conciencia.net y se pulsa la pestaña que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 289.