7 jul 2022

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de nuestro puño y letra
El «descubrimiento» de Machu Picchu (2a. parte)
por Carlos Rey

(Día del Santuario Histórico de Machu Picchu, Nueva Maravilla del Mundo)

Si bien el profesor estadounidense Hiram Bingham pasó a la historia como el descubridor oficial de Machu Picchu en 1911, «desde mediados del siglo [anterior] las visitas nacionales e internacionales fueron una constante en [este santuario histórico] —señala el periodista español César Cervera en el Diario ABC—. El naturalista italiano Antonio Raimondi pasó al pie de las ruinas, el empresario alemán Augusto Berns planeó la forma de llevarse todos los tesoros, el norteamericano Harry Singer situó su ubicación en un mapa, y el explorador francés Charles Wiener confirmó restos arqueológicos en la zona. Machu Picchu era un secreto a voces, pero ni siquiera ellos fueron los primeros europeos en poner pie allí», afirma Cervera.

Fue más bien «el conquistador castellano Baltasar de Ocampo [quien] encontró [con otros] doce compañeros a finales del siglo XVI lo que parece que era Machu Picchu, [al relatar que había] “en un altísimo cerro una plaza de suma grandeza y llanura en la superficie de edificios suntuosísimos de gran majestad hechos con grande saber y arte. Y todos los umbrales de las puertas... son de piedra mármol, famosamente obradas”, añade Ocampo. En su breve descripción lo designa como “Pitcos”, no se sabe si por error o como deformación de Picchu, y se limita a indicar que allí se habría criado Túpac Amaru I, sucesor de Titu Cusi y último inca de Vilcabamba.

»[Ocampo] no le dio mayor importancia al descubrimiento ni trató de buscar tesoros escondidos allí, probablemente porque para entonces la vegetación cubría parte de su magnitud. Era... un lugar remoto para el Imperio español, alejado de los nuevos centros de poder virreinales, y al que las autoridades religiosas y políticas prestaron muy poca atención en los siguientes siglos.

»... Fray Antonio de la Calancha... en su Crónica moralizada del orden de San Agustín [en el Perú], escrita en 1638... la designa como Vilcabamba vieja, y habla de las dificultades que tuvieron... unos frailes de su orden para alcanzar esta posición y realizar tareas de evangelización. Calancha describe el lugar como “la ciudad más grande, donde estaba la universidad de idolatría y donde vivían los profesores, hechiceros y señores de abominación”. [Esa descripción] resulta fundamental para comprender que el lugar tenía un carácter eminentemente religioso», concluye el periodista Cervera.1

¡Qué duras palabras las del fraile Calancha! No había ninguna manera de que él supiera qué tanto le importara a Dios quién fuera el primer europeo en «descubrir» este santuario histórico, pero sí había un pasaje en la Biblia que comprobaba lo mucho que a Dios le importaba la tarea de evangelización. Pues en ese pasaje San Pablo afirma que Dios quiere que todos conozcamos la verdad de que hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y la humanidad perdida, su Hijo Jesucristo, quien se hizo hombre y dio su vida para salvarnos a todos.2


1 César Cervera, «El conquistador español que descubrió «Machu picchu» y el mundo borró de la historia durante cuatro siglos», ABC, Historia, 10 mayo 2020 <https://www.abc.es/historia/abci-conquistador-espanol-descubrio-machu-picchu- y-mundo-borro-historia-durante-cuatro-siglos-202010050115_noticia.html> En línea 28 enero 2022.
2 1Ti 2:3-6